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La miel es uno de los productos mexicanos más reconocidos en el mundo y para México representa una de las actividades más importantes dentro de la agricultura; sin embargo, en general se conoce poco -y reconoce menos- su relevancia. Por eso es importante hacer visibles las barreras a las que se enfrenta actualmente para buscar e implementar soluciones que salven a la industria de la profunda crisis que vive actualmente.
¿Crónica de una muerte anunciada?
Desde hace casi una década la industria apícola ha reportado problemas para la producción de miel en todo el mundo. El despoblamiento de abejas (conocido como síndrome del colapso de la colmena) por el uso excesivo de insecticidas neonicotinoides en campos agrícolas, y su falta de regulación, afectó gravemente a países europeos y de América del Norte.
En México, el oro líquido enfrentó su peor crisis en el año 2018 por la misma razón. Las advertencias no eran nuevas, se comenzaron a reportar desde el 2012 y en los años subsecuentes se continuó solicitando apoyo del gobierno para tratar de minimizar los impactos económicos en la industria. En 2016 la Comarca Lagunera de Coahuila – Durango, y San Luis Potosí anunciaron la muerte de miles de colmenas. El sexenio de Enrique Peña Nieto no fue de mucha ayuda, de acuerdo con Enrique Estrada, presidente de la Federación mexicana de apicultores:“Tengo 40 años trabajando con las abejas y en este sexenio ha sido el peor, no les interesó la apicultura en lo mínimo”.
El caso de Yucatán y la comarca lagunera Durango – Coahuila
Yucatán
Ostentó el primer lugar nacional de producción y exportación de miel de 2008 a 2012. Disminuyó en 6 años su producción en un 58%. Su producción récord estaba entre 12 mil y 14 mil toneladas anuales de miel, este año pasarían a 4 o 7 mil toneladas (con una tendencia a la baja). En el estado dependen de la actividad apícola alrededor de 11 mil productores de miel, quienes están desalentados porque no cuentan con financiamientos ni apoyos, existe una creciente incertidumbre y preocupación.
“En 2020 no sabemos qué pueda pasar, no hay floración, no hay néctar, no hay apoyos, cómo cuidar y conservar nuestras abejas” afirmó Nelly Ortiz Vázquez, presidenta del Colegio de Ingenieros Agrónomos.
Comarca lagunera
También esta zona presentó una disminución de la mitad de su producción. En 2018 levantaron 70 toneladas, mientras que este año solo llegaron a 35. Son 125 personas dedicadas a la producción de miel, quienes se han visto duramente afectadas.
Estos estados no son las únicos en peligro, en realidad todo el mercado nacional se ha enfrentado a las mismas barreras, pero estos son los más destacables.
¿Cuál es el origen de esta interminable crisis?
Mientras algunos siguen creyendo que el calentamiento global no existe, las repercusiones en el mundo son cada vez más notorias, desde el aumento en los niveles de agua, hasta los cambios en la composición de los ecosistemas. Esto provoca sequías, incendios forestales y aumento de temperatura.
La deforestación solo alimenta más al monstruo, pues las abejas tienen cada vez menos árboles en donde anidar y plantas de las cuales tomar néctar.
Desorienta a las abejas y se ven imposibilitadas para regresar a sus colmenas. Además, otros insectos polinizadores como avispas, mariposas y escarabajos son afectados, así como aves (colibríes) y mamíferos (murciélagos) que participan en esa función.
La presencia del hongo Nosema Ceranae en las colmenas mata a las abejas y favorece otros factores letales para estos insectos, como el ácaro parásito Varroa o un pequeño escarabajo que daña las colmenas.
No darle la relevancia merecida y urgente al sector apícola nos llevará no solo a un delicado tema económico sino ambiental. Ya estamos viendo las consecuencias, pero podrían ser peores. Es urgente que tanto gobierno local como federal se unan para hacer posible la ayuda; si el gobierno pasado no hizo nada, es la oportunidad perfecta para que la actual administración haga la diferencia.
Se tiene que vender a mitad de precio o tienen poca expectativa de ventas al mayoreo. Ambas situaciones son resultado de la entrada de China al mercado de la miel.
“[Es] un círculo vicioso, el apicultor deja de producir porque no le es rentable, no le compran y entonces qué hace con tanta miel y empiezan a desaparecer las colmenas, y pues para abajo la actividad”, señaló Miguel Lara Sosa, presidente de la Sociedad Apícola Maya.
Nuestra miel se exporta principalmente a Europa: 41.2 % al mercado alemán, 18.6 % al mercado estadounidense y el restante lo conjuntan 26 países. Sin embargo, se ha dado una severa reducción en los últimos años.
Del año 2000 al año 2017, China casi duplicó la producción de este endulzante que ahora se encuentra expandiéndose en los mercados de todo el mundo al pasar de 230 mil toneladas a 500 mil con una exportación de por lo menos 12 mil toneladas. Esto no solo representa un peligro para la economía, sino también para la salud (¿qué estamos comiendo realmente creyendo que es miel?)
¿Las soluciones?
Algunas organizaciones apícolas ya dan charlas y recorridos a las personas para que se comprenda totalmente la relevancia de esta industria y de las abejas. Por su parte, la FAO instauró desde el año pasado al 20 de mayo como el Día Mundial de las abejas para que todos los miembros de gobierno y sociedad civil promuevan acciones que protejan y ayuden a los polinizadores y sus hábitats, incrementen su abundancia y diversidad, y apoyen el desarrollo sostenible de la apicultura.
Buenas noticias para Yucatán, la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder) en el estado anunció la instalación de 28 criaderos de abejas reinas amplificadas en la entidad miel para fortalecer sus colmenas, pensando en hacerlas más resistentes a los cambios climatológicos y a las plagas como la varroa.
El apoyo debe incrementar en todo el país y debe velar por los intereses de los mexicanos para tener un comercio justo. Establecer medidas para que la miel diluida no entre tan fácilmente al país o que no pueda ser vendida a precios irreales.
Tenemos ante nosotros una gran responsabilidad, es importante sumarnos a campañas de reciclaje, usar menos los automóviles, evitar embalajes y plásticos. Son acciones pequeñas pero que en conjunto pueden tener impacto.
También es fundamental pedir a nuestros gobiernos las medidas necesarias para que grandes empresas sean responsables y se sumen a las acciones en beneficio del planeta.
El comercio desleal impacta notoriamente a los productores, es difícil competir en un mercado donde se ofrecen los “mismos productos” a mitad de precio. En la mayoría de los casos, las personas no investigan si lo que están comprando es realmente miel pura y se dejan llevar por el bajo costo. El comercio justo es algo por lo que todos en la cadena de valor del sector agroindustrial deben de velar y exigir. En Smattcom puedes consultar precios y comercializar productos agroalimentarios a precios justos o competitivos directamente con productores y mayoritas, ¿Cómo?
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